Con la llegada del invierno, las bajas temperaturas nos impulsan a buscar refugio en la calefacción, pero este anhelo de calor a menudo viene acompañado de un aumento en los recibos de gas (y es que la cosa está muy cara). Esta situación, que se repite año tras año, puede convertirse en un verdadero campo de batalla en los pisos compartidos, donde cada inquilino tiene su propia perspectiva sobre cómo enfrentar el frío.
En las últimas horas, la historia de la tiktoker @sorayisnarez ha generado mucho revuelo en las redes sociales por motivos más que comprensibles. Ella, en un breve vídeo, ha revelando una experiencia que muchos habitantes de pisos compartidos comprender perfectamente.
Desde Londres, esta joven ha compartido abiertamente sus frustraciones con las actitudes de sus compañeras de piso en relación con los gastos de calefacción. Un relato que destapa las tensiones invernales que pueden surgir cuando se trata de mantener el hogar caliente y, al mismo tiempo, evitar que el presupuesto se descontrole y acabemos durmiendo debajo de un puente; en el equilibrio esta la magia de no arruinarnos.
Diferentes escuelas de pensamiento
«Diciembre es un mes mágico porque si mis compañeras de piso y yo seguimos siendo amigas después de esto es un milagro. Vivo con una inglesa y con una alemana y tenemos diferentes opiniones sobre cómo se debe de usar la calefacción«, comenzaba explicando la mujer en su viral vídeo.
@sorayisnarezEl recibo me va a costar la amistad♬ sonido original – sorayisnarez
Ella, en resumidas cuentas, es completamente reacia a encender la calefacción, mientras que sus compañeras, al parecer, tienen el gatillo fácil cuando se trata de activarla. «Esta gente viene del norte Europa, pero los del sur no tenemos dinero para más. Yo de pequeña lo más parecido que tenía a la calefacción era una estufa que se recargaba con una bombona de butano», aseguraba antes de dejar caer que aquello era un peligro que «un día iba a pegar un petardazo».
Ella, por su parte, recomienda opciones ‘naturales’ para afrontar el frío: tomarse un té o, simplemente, tiritar. «Este es el sistema que tiene el cuerpo para calentarse. ¿No te gustan las cosas naturales? Pues tirita, que es muy natural. A la alemana que le encanta la comida orgánica, la leche orgánica, unas almendras orgánicas y tiritar, que es lo más orgánico, no le gusta», aseguraba en su vídeo con ironía.
Por último, esperamos que este erizo te alegre el día:
