‘El cuerpo en llamas’ sigue sin apagarse en Netflix. La serie que ficciona el conocido como el Crimen de la Guardia Urbana está arrasando en la plataforma de streaming… y con razón. Y es que todo en esa producción está dado para triunfar: desde la historia en sí hasta las interpretaciones. Y esto último no habría sido posible sin la participación de Úrsula Corberó y Quim Gutiérrez.
Los dos actores han reconocido en varias ocasiones a lo largo de estos meses lo complicado que fue para ellos meterse en la piel de dos asesinos. Tanto el proceso previo como los seis meses de rodaje fueron de lo más exigentes y, como cabría esperar, ello dio pie a muchas anécdotas como la que os traemos hoy.
Un golpe y una hora y media llorando
Según contó la actriz en su paso por el podcast La Script, ella se encontraba en el set que recreaba el desván de la casa de Rosa Peral cuando sufrió un incidente que, básicamente, la dejó llorando una hora y media.
“Un día que yo estaba muy cansada tenía una escena en la buhardilla, que es la habitación de mi hija. No puedes mirar el móvil, pero como estaba cansada ya empezaba a hacer cosas que no se tenían que hacer”, relató la actriz antes de revelar que, de repente, se dio “una santa hostia en la frente con la viga”.
Ella, por lo visto, también pensó mucho en el “chico nuevo de sonido” en quien no dejaba de pensar la intérprete. “Decía: ‘este hombre, que llega el primer día y, en la primera escena que le toca, de repente Úrsula Corberó llega, se pega con una viga en la cabeza y se cae al suelo”, contaba entre risas la catalana.
Y es que, a pesar de que ahora se ría, aquel fue un momento verdaderamente complicado para ella: “me tiré hora y media de reloj llorando”. Y la cosa no acabó ahí ya que, por la duración del incidente, tuvieron que modificar el plan de rodaje: “Tuvieron que parar el rodaje”, confesó.
Según ella misma cuneta, lo bueno es que no le salió ningún hematoma y pudo continuar rodando sin problema: “no me salió ni un hematoma, yo siempre digo que estoy diseñada para rodar”.
Fuente: As.
Por último, esperamos que este erizo te alegre el día:
