La historia de Albert López y Rosa Peral volvió a estar en boca de todos con el estreno de la serie «El Cuerpo en llamas» en Netflix a mediados del año pasado. Recordemos que ahí, a pesar de que sus personajes están interpretados por Úrsula Corberó y Quim Gutiérrez, se nos cuenta la historia de un crimen real llevado a cabo por personas reales.
El conocido como ‘Caso de la Guardia Urbana’ comenzó cuando el cuerpo de Pedro Rodríguez, pareja de Rosa, apareció en el maletero de un coche completamente calcinado. Lo que ocurrió a continuación, muy probablemente, ya lo sabréis.
Desde su condena, Albert ha pasado seis años en prisión de los 20 que dictó la sentencia. A diferencia de Rosa, quien ha sido trasladada varias veces de cárcel y ha protagonizado diversos incidentes, Albert ha mantenido un perfil más bajo. Sin embargo, en 2022 decidió romper su silencio y enviar una carta al programa ‘Cuatro al Día’ para explicar su situación actual.
La vida de Albert en la cárcel
«Podría estar peor, la realidad que aún estoy fuerte mentalmente, si bien, una situación como la que vivo hace mella pues eres preso no solo de cuatro paredes sino también de toda iniciativa», detalló el reo.
Respecto a la gran cantidad de tiempo que tiene disponible en su día a día, Albert asegura que esto le ha ayudado mucho para conocerse a sí mismo: «Es obvio que es un lugar para la introspección más absoluta: te conoces como nunca y lo más importante, conoces a tu entorno como jamás imaginaste, que en mi caso ha sido una grata sorpresa».
En la carta, Albert reitera su inocencia y dejaba claro que estaba pasando por un momento ‘muy difícil’. A pesar de estar en prisión, afirma que sigue mentalmente fuerte, aunque reconoce el impacto que su figura mediática tiene en su día a día dentro de la cárcel:
«Al final he visto que sencillamente y dada la mediatización de mi persona soy persona non grata en los diferentes puestos a cubrir en mi módulo e incluso cuando algún funcionario requirió de mi persona para cubrir algún puesto laboral», detallaba.
Meditando, estudiando y escribiendo
También menciona que ha aprovechado su tiempo para estudiar criminología, aunque inicialmente tenía la intención de estudiar Derecho: «La idea inicial era Derecho, pero a día de hoy no creo en absoluto en el Derecho Penal, pues he sido testigo de la tergiversación».
Lo más destacado de su mensaje es su insistencia en su inocencia en el crimen. Afirma que su conciencia está tranquila y que su participación se limitó al encubrimiento, una acción que en España está penada con un máximo de tres años de prisión. Y finaliza reconociendo cuál fue, según él, su mayor error: «seguir dando por sentado que Peral rectificaría y contaría lo que realmente le sucedió aquella tarde».
Fuente: Las Provincias.
Por último, esperamos que esta cabra te alegre el día: