Aitana Ocaña responde a las críticas por sus bailes en el último concierto

La talentosa cantante Aitana Ocaña ha estado en el centro de la atención mediática desde el lanzamiento de su último álbum, titulado ‘Alpha’. Su gira comenzó el pasado fin de semana en Valencia y, como probablemente ya habréis visto, ha habido muchísimas críticas a raíz las coreografías sensuales que realizó junto a sus bailarines en el escenario.

Estos movimientos sorprendieron a algunos de los padres y madres que asistieron al concierto con sus hijos pequeños, quienes conforman una parte significativa de su audiencia. Algunos consideraron que las coreografías eran provocativas y no aptas para menores de edad… y se ha liado, en definitiva.

Aitana rompe silencio

En una entrevista con Europa Press, Aitana se pronunció respecto a esta agria polémica y, como siempre con ella, fue muy clara y concisa: «Decir que en este disco hay una Aitana más rebelde y provocativa es el titular fácil, te voy a ser sincera, y creo que es un clickbait, pero sí que es verdad que en este disco hay una Aitana más madura«.

La cantante reconoció que siempre ha sido rebelde, pero que en su álbum anterior, ’11 razones’, mantuvo un enfoque más suave debido a su edad y experiencia limitada: «Ahora que he vivido un poquito más me apetecía hacer unas canciones, que son iguales en cuanto a amor y desamor, pero que hablasen también de empoderamiento«. Ahora, con 24 años, quería crear canciones que hablaran tanto de amor como de empoderamiento.

En cuanto a sus jóvenes seguidores, Aitana expresó su satisfacción por tener un público adolescente y joven y su deseo de mantenerlo durante muchos años más . No cree que se trate de un tema de ‘escoger’: «Al final tengo un público adolescente y joven, que quiero seguir teniendo, pero hay mucha gente que me dice que quiero cambiar de público y no, no es cierto. ¿Tú sabes lo difícil que es tener a niños de fans?«, afirmó.

Una cuestión de empoderamiento

La cantante está orgullosa de la diversidad de su audiencia y aprecia especialmente a las familias que asisten a sus conciertos. «Yo por supuesto quiero tener a esos niños y que crezcan con mi música, y si quiere venir otro público, pues también va a ser bien recibido, pero es que yo no tengo esa necesidad de atraer a otro público. En mis conciertos yo veo a familias y es muy guay tener ese público familiar y a mí me encanta», concluyó.

En resumen, Aitana Ocaña está evolucionando artísticamente, abrazando una imagen más madura y empoderada, pero sin perder de vista a su querido público joven y adolescente, así como a las familias que la apoyan. Su crecimiento musical es un testimonio de su evolución personal y artística a lo largo de los años.

Por último, esperamos que este erizo te alegre el día: