Querer mostrar nuestra ‘mejor versión’ el día de nuestra boda es algo normal (nadie quiere salir mal cuando tanta gente te mira). Por lo general, para que esto sea así, antes de pasar por el altar, nos ponemos en manos de expertos en el mundo de la peluquería, el maquillaje y hasta el deporte; hasta ahí, todo más o menos normal. El problema puede surgir cuando queremos ir un poco más allá y, como en el caso de la protagonista de nuestra historia de hoy, nos damos un ‘repasito’ estético en una clínica… y la cosa sale mal.
Así lo relató la usuaria de TikTok @lgambler quien se puso bótox días antes de su boda para ‘lucir perfecta’ y, por desgracia, el tratamiento no salió como estaba previsto y lo que tendría que haber sido un sueño, se acabó por convertir en una pesadilla.
La foto del ‘antes’:
Que algo había salido mal fue algo de lo que ella se percató desde el momento de los pinchazos. Al parecer, notó una irregularidad en la zona de la barbilla. Y tenía razón: el bótox se había infiltrado en la zona de los músculos de la barbilla, cosa que no debería ocurrir y que, como veréis en el vídeo, le produjo en la sonrisa un efecto que podríamos catalogar de ‘poco natural’ y que, según ella, «no parecía humana».
@lgamblerAnd one day I will look back and laugh😌♬ original sound – Lgambler
“Hola chicos, soy yo teniendo una crisis. Me caso mañana. Y la sonrisa, tratando de hacer bromas y jugar con ello o lo que sea, ya no me parece graciosa y no puedo dejar de llorar”, explica la joven mientras, desde su coche, muestra el resultado de su cara, en la que se evidencia una hinchazón extraña en la zona inferior de su boca.
Otra cosa que a ella le molestó es que, al evidenciarse el problema, la esteticista responsable de la intervención se limitó a decirle que pensase en positivo: “La mente es muy poderosa. Lo estoy intentando. Esa soy yo. Realmente lo estoy intentando, muchachos. Realmente lo estoy intentando”, asegura ella al borde del llanto.
A pesar de este drama en un post posterior, ella mostró que, el día de la boda, todo estaba mejor: no se le notaba tanto la inflamación y ella estuvo más segura de su imagen. A pesar de esto, el fotógrafo del evento se ofreció a hacerle más fotos al día siguiente, cuando la inflamación ya hubiese desaparecido por completo.
Fuente: la Vanguardia.
Por último, esperamos que este erizo te alegre el día:
