Hablar de Risto Mejide es hablar de una de las personalidades más polémicas de nuestro país. El presentador de ‘Todo es mentira’ consigue que suba el pan con un simple susurro y, cuando se pone delante de una cámara, la audiencia se parapara para la que pueda caer (tanto para lo bueno como para lo malo).
Pero claro, en su vida privada, últimamente, las cosas han sido un poquito más… moviditas, por decirlo suavemente. Y es que, hace ya casi un año, el presentador anunció junto a la que era su pareja, Laura Escanes, que lo suyo había llegado al final: contra todo pronóstico, una de las parejas más consolidadas de nuestro país se rompía para siempre.
Ya por separados, Laura comenzó una relación con el músico Álvaro de Luna que, por las publicaciones de ambos, parece que sigue viento en popa; Risto, hace apenas un puñado de meses, también hizo lo propio con Natalia Almarcha, una farmacéutica que no tenía nada que ver con el mundo de las celebridades.
Risto y Natalia. una relación ‘irregular’
Eso sí, mientras que de Escanes íbamos sabiendo cositas, de la relación de Risto con Natalia apenas si sabíamos nada hasta que, hace unas semanas, se anunció la ruptura… y posterior reconciliación.
Tras esa breve crisis, retomaron la relación y ambos asistieron a la boda de Edurne y De Gea, cosa que ellos mismos publicaron en sus redes sociales y, desde entonces, parecía que habían conseguido encauzarlo todo (spoiler: no).
La cosa es que, cuando se anunció la reconciliación entre ambos, se ‘filtró’ que la valenciana habría puesto una serie de ‘condiciones’ al publicista para que la cosa, al menos por su parte, funcionase. Esto es algo que, por supuesto, ninguno de los dos ha confirmado de ninguna forma.
Fueron a la boda, los vieron por Madrid y todo parecía que iba encaminado a que, ahora sí, la cosa funcionase como ambos querían que funcionase… pero no funcionó: por motivos que se desconocen, ahora sí podemos decir que ha habido una ‘ruptura definitiva’.
«Por mi salud mental, necesito ya que paren de crear noticias, que se olviden de mí, que no me relacionen. Este tema seguro que le cansa ya a la gente. Si yo he pasado página y he cambiado hasta de libro, que se actualicen«, sentenció Almarcha en sus stories de Instagram, dejando más que claro que da por finalizada su etapa con el catalán y que quiere avanzar dejando todo eso atrás.
Harta de que se filtre su información privada
Además, Natalia, como bien ha especificado en uno de sus últimos stories, ha decidido ‘abrir’ su perfil de Instagram que, hasta ahora, estaba en privado. Como ella bien explica, está decisión la ha tomado después de que la prensa filtrase sus fotos privadas: «Para que se publiquen capturas de mi IG privado o que se tergiverse información para crear conflictos y lucrarse, me lo hago público, que lo he tenido así toda mi vida«, escribió la joven.
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Fuente: 20 minutos.
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