Conoce a Mónica, la hermana mayor de Úrsula Corberó y su inesperada profesión

A Úrsula Corberó ‘La casa de papel’ le cambió por completo la vida. Hasta entonces era una de las actrices más prometedoras españolas, pero su papel protagonista en la serie de Netflix le lanzó al estrellato a nivel mundial. Los espectadores enloquecieron con Tokyo y con el resto de atracadores. Sus seguidores aumentaron rápidamente hasta superar los más de 22,4 millones que tiene en estos momentos.

«Las mujeres de mi vida», dijo la actriz sobre su madre y su hermana

Como suele pasar cuando alguien alcanza los niveles de popularidad de Úrsula Corberó, su entorno pasó a ser también de interés general. Esto es lo que ha ocurrido con un familiar suyo a pesar de la poca información que sabemos de ella. Su nombre es Mónica Delgado y es la hermana mayor de la actriz. A pesar de que la de ‘Física o Química’ no es muy dada a hablar de su vida privada, nos ha ido dando algunas pistas a lo largo del tiempo.

Las mujeres de su familia han inspirado mucho a la actriz y en varias ocasiones ha presumido de ellas a través de sus redes sociales. «Mi madre se quedó embarazada de mi hermana con 17 años. Cuando le empezó a asomar la barriguita pasó a ser la peste del barrio, se quedó sin amigas y aun siendo una estudiante brillante la echaron del colegio porque era un mal ejemplo para las demás niñas», explicó una vez sobre su madre.

Para su hermana Mónica, también tuvo unas breves palabras que muestran todo el amor que siente por ella. «La mami y la sister. Las mujeres de mi vida», escribió en una foto que compartió en sus historias y en la que aparecen las tres. En la imagen, que pertenece al estreno de la última temporada de ‘La casa de papel», aparecen las tres más que felices celebrando los éxitos de Úrsula Corberó.

Corberó le dedicó unas bonitas palabras a su hermana

Las pocas veces que Úrsula ha hablado sobre su hermana, ha dicho cosas tan bonitas como estas: «Ha trabajado sin parar toda su vida, pasando por momentos muy críticos con un hijo al que alimentar. Desesperada por conseguir un empleo, reunió dinero de donde pudo y se formó para ser tanatopractora, pero resulta que ahí las mujeres no estaban bien vistas y le ponían pegas para todo. Nunca le dieron trabajo, aunque terminó sus prácticas con notas sobresalientes».

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Fuente: YASSS

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