Bryan Johnson es un multimillonario que, básicamente, ha descubierto lo que podría ser la fuente de la eterna juventud. Eso sí, esa fuente parece no ser muy económica: dos millones al año es lo que le cuesta a este señor de 37 años tener el físico de uno de 18. Y es que tener en plantilla a 30 médicos para que te vigilen de forma diaria no es precisamente barato.
Él, básicamente, dedica su rutina a que sus principales órganos funcionen de la mejor forma posible. Dedica horas a cuidar su piel, dientes, riñones, recto, cabello… está literalmente obsesionado con que todo en su organismo funcione correctamente y, en caso de no hacerlo, poder ‘repararlo’ a tiempo.
Él mismo ha bautizado a su rutina como ‘Project Blueprint’ y, básicamente, implica una dedicación total a la misma. Lo primero que hace Johnson es despertarse a las 5 de la mañana y meterse dos docenas de suplementos de diversa índole (la mayoría de ellos, vitaminas).
Lo siguiente que hace es pegarse una buena sesión de deporte durante una hora, luego se bebe un zumo verde con creatina y péptidos de colágeno y, finalmente, se se cepilla los dientes y usa hilo dental mientras se enjuaga con aceite de árbol de té y gel antioxidante. Luego, antes de irse a dormir, utiliza durante dos horas unas gafas que bloquean la luz azul.
Además de todo esto, Johnson se somete de forma semanal a exámenes médicos exhaustivos que incluyen electrocardiogramas, resonancias magnéticas o colonoscopias entre muchas otras cosas.
El empresario también monitoriza de forma diaria su peso corporal, grasa corporal, nivel de azúcar en sangre y colesterol entre otros parámetros como su ritmo cardiaco o su presión arterial.
¿De dónde le viene esta obsesión?
Pues bien, par entender el origen de esta fijación por su salud y por mantener su cuerpo lo más ‘joven’ posible, debemos remontarnos a cuando Johnson cumplió 30 años y vendió su empresa, Braintree Payment Solutions, a eBay por 800 millones de dólares.
Según parece, aquella etapa previa a la venta fue muy dura para él y lo sumió en un estado de grave recesión de salud física y mental. Una vez vendida la compañía, decidió empezar a dedicar su vida a su propio cuidado.
Jeff Toll, uno de los internista que forma parte del equipo de Johnson, aseguró al medio Bloomberg que lo de su cliente era algo especial: “Trato a atletas y celebridades de Hollywood, y nadie va más allá que Bryan”, reconoció el experto en salud.
A vosotros, ¿qué os ha parecido todo esto?
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Fuente: La Vanguardia.
Por último, esperamos que esta cabra te alegre el día: