Te contamos cómo es el corredor de la muerte de Tailandia en el que podría acabar Daniel Sancho

Estamos en pleno siglo XXI y eso choca mucho con que sigamos hablando de corredores de la muerte, pero lo cierto es que estos todavía existen y, sin ir más lejos, los Estados Unidos, una de las mayores potencias del mundo, es uno de los países que lidera el ranking mundial de ejecuciones en prisiones. Eso sí, todo apunta a que el número uno se lo lleva China, quien no es precisamente transparente con el número de personas que ejecuta al año.

Hoy es pertinente hablar de todo esto porque, como probablemente ya sabréis, Daniel Sancho se enfrenta a la pena capital después de que la policía de Tailandia lo acusase de asesinato premeditado. Esto, en el país asiático, está penado con la muerte.

A las puertas del corredor de la muerte

Precisamente por todo esto el español acusado de acabar con la vida de Edwin Arrieta y desmembrar su cuerpo en catorce partes está ahora mismo retenido en la prisión de Koh Samui a la espera de juicio. Pero, ¿cómo es el corredor de la muerte en el que, previsiblemente, pasará el resto de su vida Daniel? Pues vamos a a verlo.

Lo primero que debemos tener presente es que, en caso de ser condenado a la pena capital, Daniel pasará años en el corredor de la muerte hasta recibir la inyección letal. Ahí, en ese recinto, compartirá techo con los criminales más peligrosos del país.

Según revela el diario El Mundo, actualmente en Tailandia hay 520 presos en el corredor de la muerte. De estos, unos 20 son extranjeros y, de entre ellos, el delito más común por el que están condenados es el tráfico de drogas.

Si desean salvarse, la única opción que les queda es que el día del cumpleaños del rey Maha Vajiralongkorn este, como acto de buena voluntad, decida conmutar su sentencia, cosa que cambiaría la condena de muerte por la cadena perpetua. Sin ir más lejos, esto fue lo que ocurrió en 2020 con Artur Segarra, el español condenado por asesinato en 2016. Gracias al rey, pasó del corredor de la muerte a una prisión de cadena perpetua.

Si Daniel corre esa misma ‘suerte’ o no es algo para lo que habrá que esperar años (si es que lo condenan a la pena capital, claro). Mientras tanto, deberá hacerse a la idea de que dormirá junto a, por ejemplo, Somkid Pumpuang, el llamado ‘Jack el destripador tailandés’, que acabó con la vida de cinco mujeres masajistas entre enero y junio de 2005. Al igual que ha ocurrido con Edwin, él también desmembró a sus víctimas.

En ese corredor también estará Nirut Sonkhamhan, quien cumple condena por envenenar a nueve taxista y acabar con la vida de cuatro de ellos. Finalmente, también estará compartiendo estancia con Sararat Rangsiwuthaporn, condenada por arrebatarle la vida a 14 personas utilizando cianuro.

Fuente: Marca.

Por último, esperamos que este erizo te alegre el día: